El Senado argentino prevé agilizar a partir del lunes la tramitación del proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo aprobado el viernes por la Cámara de Diputados para poder aprobarlo antes de que termine el año, previsiblemente el29 de diciembre.
La iniciativa está ya en manos de las comisiones deBanca de la Mujer-la única que no está integrada por hombres-, Justicia y Asuntos Penales y Salud, aunque la presidenta de la Banca de la Mujer, Norma Durango, detalló que podría reducirse a dos comisiones para no extender los plazos.
Fuentes parlamentarias consultadas por la agencia de noticias argentinaTélamexplicaron que la intención es iniciar cuanto antes el plenario de expositores, lo que podría producirse el mismo lunes 14, para dar dictamen la semana próxima y llevarlo a votación entre el28 y el 30 de diciembre.
La presidenta de la Banca de la Mujer del Senado, Durango, declaró estar convencida de queel Senado “va a lograr esta vez”sancionar la ley de interrupción voluntaria del embarazo y advirtió de que si no se consigue la sanción “sería un retraso” para el país y “para las mujeres”.
“No podemos decir contentas porque el aborto siemprees una conmoción emocional, pero estamos muy satisfechas con los votos que se consiguieron ayer y estamos trabajando a ‘full’ con todos los senadores que están en la duda para que puedan entender qué significa tener esta ley”, dijo.
Durango argumentó que no se trata de “un problema de creencias sino de salud pública” e indicó que “no se puede tener más la penalización del aborto, no sólo porque no atiende la libertad de planificar el futuro y de decidir sobre nuestro propio cuerpo, sino porque ademáses un problema de salud“.
Para la senadora, debe quedar claro que“la ley no obliga ni recomienda a nadie a abortar”ya que “nadie está obligado a abortar”. “Si no hay ley vamos a contribuir a la clandestinidad y a un gran negocio que hacen algunos médicos y algunas clínicas y a la venta insegura y carísima del misoprostol”.
En los últimos 25 años, más de 50 países, entre ellosEstados Unidos, Canadá, Australia, China, Sudáfrica y Uruguayhan modificado su legislación, reconociendo que el acceso al aborto sin riesgos es fundamental para la protección de los derechos, la vida, la salud y la autonomía de las mujeres y niñas.